A veces el sector privado va más rápido que el público en cuento a bibliotecas, pero… ¿Crees que el sector público está acogiendo de manera satisfactoria todos los avances y posibilidades que ofrecéis para bibliotecas?

Durante la pandemia y el confinamiento, los profesionales de la documentación han adaptado y continuado ofreciendo a sus usuarios, desde su casa, todos los servicios que les ha sido posible. Muchos de ellos, incluso han ampliado estos servicios ofreciendo alguno más innovador, utilizando varias redes sociales u otras soluciones tecnológicas o, simplemente, trasladando sus comunicaciones con los usuarios al entorno telemático. La administración ha demostrado una gran capacidad de adaptación a las necesidades cambiantes del momento con una rápida adopción de los avances tecnológicos.

Aunque es muy necesario que la administración no pierda esta tendencia, pese a que hayamos recuperado cierta normalidad. Ha de demostrar más proactividad, avanzarse a las necesidades de sus usuarios escogiendo las herramientas adecuada, en lugar de reaccionar a las circunstancias cambiantes una vez se hayan producido.

Es de vital importancia que las bibliotecas garanticen el acceso a la información y la documentación en cualquiera de sus formatos. Y, como nos han enseñado experiencias recientes, el acceso a libros y documentos electrónicos, así como a objetos digitales y materiales en acceso abierto, ha cobrado aún mayor relevancia durante la pandemia. Esto hace necesario que la administración adopte plataformas que faciliten el acceso fácil y fluido a toda esta gama de materiales.

No hay que descuidar el derecho de la ciudadanía al acceso a la información pública. Se trata de un derecho ampliamente regulado en la legislación española, que las instituciones de la administración pública y sus bibliotecas y centros de documentación han de garantizar. Y es que mediante un catálogo virtual de consulta pública, con acceso a las principales páginas de referencia como Google, y Wikipedia, se podrá garantizar el acceso a esta y otra información por parte de la ciudadanía, asegurando su autonomía, la seguridad de los datos y su privacidad en todo momento.

¿Cómo ves las nuevas generaciones de bibliotecas y bibliotecarios?

En relación con los perfiles profesionales, es necesario más formación en herramientas tecnológicas por parte de los profesionales de bibliotecas, o extender sus conocimientos a un abanico más amplio de aplicaciones. De esta forma se puede garantizar que la adaptación de los servicios bibliotecarios a diversas circunstancias sobrevenidas sea aún más ágil.

Los servicios que ofrezca la nueva generación de biblioteca deben ser diseñados con el fin de poder ser virtualizados en cualquier momento sin perder las capacidades de mantener una comunicación fluida con el usuario y sin dejar de lado ninguna tipología de usuario, ya sea por sus capacidades o competencias o por su acceso a las tecnologías. Las tecnologías que permitan seguir ofreciendo los servicios o ampliarlos, adaptándolos a diversas circunstancias sobrevenidas, deben cumplir con tres condiciones: deben permitir su uso, tanto por parte de los usuarios como por parte de los profesionales, desde cualquier lugar y desde cualquier dispositivo; deben poder ser utilizados de forma sencilla e intuitiva, también tanto por parte del usuario final como por parte del profesional que provee el servicio, y deben permitir no excluir de su uso ningún usuario por la razón que sea.

¿Qué esperas de las XXI Jornadas Bibliotecarias de Andalucía?

Desde OCLC lo que esperamos de las XXI Jornadas Bibliotecarias de Andalucía es poder retomar el contacto presencial con los bibliotecarios andaluces después de más de dos años de pandemia en la que nos hemos visto obligados a tratar de forma exclusivamente telemática. Es muy importante el trato personal y presencial para conocer las necesidades de los profesionales de bibliotecas y sus instituciones, los encuentros cara a cara son siempre más interesantes, amables y productivos.

¿Qué opinión te merece el trabajo de la AAB en favor de la profesión?

La AAB es una de las asociaciones de bibliotecarios más grandes e importantes de España. Su labor es encomiable, tanto en la defensa de la profesión, como de las propias bibliotecas. Sus informes de prospectiva y las actividades desarrolladas por sus grupos de trabajo son un referente, no solo en Andalucía, también para el resto de los profesionales de bibliotecas de España. Además, sus actividades de formación, sus jornadas y sus publicaciones, cuentan con gran prestigio y revisten una gran calidad, todo ello en beneficio de la profesión y de sus profesionales.